El año del Perro

En cierto sentido, el año del Perro es el año del desvalido. El Perro defiende de un modo inquebrantable la libertad y la igualdad, y su sentido de la justicia y del juego limpio acarrean fuertes disensiones y enfrentamientos, en los que los más débiles salen victoriosos.
Se hablan de asuntos controvertidos y se instigan los cambios. Las personas tienen un concepto de la vida menos materialista y más idealista, y se inclinan a hacer actos caritativos y a actuar como paladines de las causas justas.
La determinación de los perros ocasiona choques, levantamientos y rebeliones contra las tiranías y la opresión, pero su buen juicio y generosidad también garantiza que se vuelva a instaurar la paz y la estabilidad una vez que se hayan realizado las reformas necesarias.
Ése puede ser un año preocupante, pero, estando el Perro de guardia, no existe en verdad ninguna razón para alarmarse. Los chinos, sin embargo, temen al año del Perro de metal, del que se dice que trae guerras y calamidades.

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