Papá Escorpio ama entrañablemente a su vital hija. Es un padre devoto de corazón que desea lo mejor para sus hijos, aunque muchas veces no actúe consecuentemente. Por lo general es un hombre ocupado que a menudo se encuentra lejos de casa por cuestiones de negocios, y posiblemente lleve una vida más bien complicada, llena de intrigas que no tienen cabida en la vida de los niños.
La niña Escorpio tendrá que aprender a ser un poco independiente, cosa que le resultará difícil porque en el fondo es una niña con una fuerte dependencia emocional. Necesita que papá le confirme constantemente su amor, pues se siente herida mucho más profundamente de lo que demuestra y puede preocuparse y cavilar si las cosas no andan bien. Papá debería usar su intuición para dar con la mejor manera de ayudar a su hija.
Papá deberá vigilar su tendencia al autoritarismo. Él disfruta ejerciendo control sobre su hija, pero debería recordar que Escorpio se lo toma todo muy a pecho y es fácil de herir, pese a su aspecto agresivo. Debería concentrarse más en sus mejores características: crear un hogar bien dirigido y ordenado donde su hija sepa exactamente qué se espera de ella.
Ambos detestan el cambio y no tienen la menor voluntad de adaptarse; sospechan de las nuevas maneras de hacer las cosas y prefieren los métodos tradicionales. A ninguno le gusta mostrar sus sentimientos y sí esforzarse por controlar sus emociones. Es probable que haya encontronazos cuando se manifiesten esos mismos sentimientos reprimidos.
Pero Escorpio tiene una habilidad casi psíquica para ver los sentimientos ocultos de los otros y desvelar sus pensamientos secretos. Si ambos utilizan amablemente esta habilidad con el otro, lograrán evitar enfrentamientos extremos.
