La rodonita es un silicato de manganeso que forma cristales generalmente imperfectos. Se trata de una piedra opaca o semitransparente de color rojo oscuro con inclusiones a veces dominantes de dendritas negras de óxido de manganeso. Se utiliza como objeto de adorno en forma de cabujones, bolitas para collares y objetos artísticos. Es fácil de encontrar en los establecimientos especializados y su precio no es elevado.
En el lapidario alfonsino aparece en el grado 7 del signo de Géminis y dice así:
Es la piedra de la serpiente. Es de color muy bermeja, tanto que torna como a negror. Son de muchas formas pues de ellas hay grandes y pequeñas, pesadas son y duras de quebrantar, pero lábranla los hombres y hacen de ellas cuales formas quieren. Su virtud es tal que si la cuelgan al cuello del que nació endemoniado, sana; eso mismo hace al que tiene la enfermedad a la que llaman olvidanza, que viene por enfermedad del meollo.
La relacionan con la dos estrellas, la delantera y la siguiente que están en la palma derecha de la figura de Orion. Se trata de la mayor de Orion situada cerca del grado 1 de Cáncer.
Propiedades astrológicas de la rodonita
La rodonita se comporta como una combinación estable y armónica del tercer, quinto y séptimo Rayo, es decir de Mercurio, Marte y Saturno. Es muy útil para aquellas personas en las que predomine el mundo mental, es bueno para las personas demasiado ensimismadas que sufren olvidos y negligencias a causa de sus despistes. Esta piedra usada continuamente ayuda a transformar las ideas en acciones u obras, otorga perseverancia y provoca el empuje necesario para ponerse manos a la obra y poner en marcha proyectos largamente meditados. Es como un pequeño detonador mental que impele a actuar en el plano de lo material.
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