Virgo perverso

El problema de haber nacido perfeccionista es que la vida, loca y complicada, y especialmente el amor, no suele adecuarse -si es que alguna vez lo hace- a sus expectativas. Por eso, el nativo de Virgo puede tornarse amargo y desilusionado, encontrar defectos en sus parejas potenciales y alejar a las personas que lo atraen con sus constantes críticas y sarcasmos.

Es cierto: usted sabe que esa actitud, en gran medida no es más que una cortina de humo para mantener en secreto sus profundas dudas y su temblorosa seguridad, pero puede funcionar demasiado bien y acabar convirtiéndose en un cuchillo de plata que usted afila para atravesar su propio corazón. Una mirada dura de esos ojos gélidos hace que los posibles amantes desaparezcan de su vida.

Además, usted tiende a llevar el sentido de la responsabilidad hasta sus extremos, rompiéndose la espalda para ayudar a otros cuando en realidad debería estar pensando en usted mismo… Y después se pregunta por qué aquel prometedor idilio se ha transformado en un recuerdo lleno de resentimiento.

También puede ser distante y poco demostrativo, y evitar el contacto demasiado íntimo incluso con su pareja, mostrándose incapaz de un abrazo espontáneo. Las otras dos remoras para la sensualidad de Virgo son la preocupación y el trabajo.

Sí, usted quiere ser todo para su pareja, y hará enormes esfuerzos por complacerla en la cama. ¡Pero se supone que usted también debe disfrutar! Y la preocupación constante acerca del rumbo de la relación es una manera segura de no ir a ninguna parte. Pues, aunque sin duda su pareja adora las proezas amorosas que usted le ofrece, también le gustaría que fuera usted quien disfrutara de tanto en tanto, en vez de dar constantemente.

El trabajo es la otra carga que pesa sobre su responsable corazón. Ya sea una importante carrera contable, o la pila de ropa para planchar, su sentido del deber tiende a permitir que el trabajo interfiera en su vida y en el amor.

Usted está siempre haciéndoles favores a los demás, quedándose más tiempo en la oficina hasta horas improcedentes, pasándose toda la noche limpiando para que el piso de la cocina reluzca. El deseo, el amor relajante, puede olvidarse con facilidad en este frenesí de actividad. Por favor, trate de vivir un poco más en el presente. Mañana, su lista de cosas por hacer todavía estará allí, pero tal vez su pareja ya se haya marchado. Recuerde su potencial para ser uno de los mejores amantes del Zodíaco… y concrételo.

Signo Virgo