Ambos son brillantes, vitales, amables y amistosos; una alegre pareja que se lleva muy bien. Mamá comprende la manera de pensar de su hijo y puede jugar con él y enseñarle de una manera que él realmente disfruta. Acuario se deleita con su divertida e inteligente mama.
Ambos detestan la aburrida rutina y aman el cambio y la excitación. Mamá siempre tiene ideas brillantes de cosas para hacer y junto a su hijo disfruta de juegos, viajes, bromas, exploraciones y despilfarros. A estos dos, desde luego, la vida jamás les resultará aburrida.
Pero mamá puede ser excesivamente relajada cuando se trata de imponer disciplina. No tolera que la molesten con reglas tediosas y, si no vigila la educación de su hijo, Acuario se le escapará de las manos. Deberá hacer lo posible para enseñarle cuál es una conducta aceptable y cuál no. De todos modos, aunque tengan montones de peleas, ¡disfrutarán cada minuto de discusión! Acuario adora defender ardientemente sus derechos y mamá lo admira en secreto por eso.
Sagitario estimulará a su hijo Acuario a pensar por él mismo, a cuestionar la autoridad y a decir lo que piensa. Ella cree en la autoafirmación y la espontaneidad y Acuario está contento de tener a alguien que comprende y acepta su estilo beligerante. A los dos les gusta mucho correr riesgos y no les gusta nada adaptarse a las circunstancias.
Sobre todo aman compartir ideas, hablan y sueñan con grandes planes infinitos y no les importa que pocos de ellos lleguen a convertirse en realidad.
A Acuario le encanta que mamá Sagitario lo trate como a un adulto y se siente feliz y estimulado con su vital compañía. Él sabe cómo enloquecerla con lógica y la brusquedad de ella la lastimará más de lo que parece. Pero ambos creen que la vida es un desafío excitante y disfrutan compartiéndolo.
