Puede ser una brillante combinación para toda la vida, porque ambos integrantes aportan sinceridad y optimismo.
Si a usted le atraen los idilios sazonados con peleas al rojo y reconciliaciones aún más ardorosas -con las maletas del «te dejo» todavía por deshacer-, entonces el amor con alguien de su mismo signo puede ser recomendable.
Además, en los intervalos entre las feroces peleas, esta combinación puede proporcionar un equilibrio perfecto entre el cuerpo y las emociones.
Ambos pueden advertir perfectamente lo que pasa inadvertido a los ojos de los demás cuando un Aries avanza audaz y firmemente por la vida: la necesidad, cuidadosamente disimulada, de elogios, aprecio y seguridad.
Pero le resultará difícil aceptar que la necesidad de libertad de su pareja es tan intensa como la de usted mismo.
Puede ser una brillante combinación para toda la vida, porque ambos integrantes aportan sinceridad y optimismo.
Así vale la pena trabajar para conseguir que el amor sea duradero, turnándose para mandar y atenuando el deseo de control.
Y ambos necesitan esforzarse por exigir menos y no ser tan egoístas.