La esfera de la carta astral consta de doce casas, que son representativas de doce escenarios en la vida de una persona. Así pues, una casa representará su escenario familiar, otra el laboral, otra su vida de pareja, otra su mundo de amistades, etcétera. Cada casa se abre en la cúspide de uno de los signos astrológicos, y el individuo actúa como si perteneciera a ese signo en cada uno de las esferas de su vida.
Así pues, alguien puede ser del signo solar de Cáncer, pero tener a Tauro en la casa 7 de la pareja y a Aries en la 6 del trabajo. Por lo que su vida laboral será una cuestión de iniciativa y para él será importante la estabilidad y la fidelidad en su matrimonio. Puede haber planetas o no en una determinada casa astrológica; de haberlos, su energía va a colorear cada escenario con la vibración planetaria. Una persona con el planeta Urano en su esfera familiar va a ser muy independiente de su familia o va a vivir en una casa original; así como un sujeto con Júpiter en la casa 11 de las amistades suele ser muy expansiva y a hacer amigos con facilidad. Cada casa es un área de experiencia, que estará decorada con la personalidad de cada signo astrológico, mientras que los planetas son los actores de cada escenario. De esta manera, la vida es como un teatro.
Casa 1
Casa 2
Casa 3
Casa 4
Casa 5
Casa 6
Casa 7
Casa 8
Casa 9
Casa 10
Casa 11
Casa 12
