Como reconocer a Capricornio 3

Es un ser tan tímido y dulce, un poco testarudo tal vez, pero de manera tan comedida que parece inofensivo. Una persona tan segura, en quien se puede confiar, y que le halaga agradablemente a uno. ¿Quién seria capaz de herirle o de considerarle ambicioso?

Entretanto, Capricornio se vale de tus propias debilidades, ínfulas y celos para hacerse fuerte. Es tan útil, y acaba siendo tan indispensable, que eres tú quien finalmente le pide que tome las riendas.

En lo sucesivo, él gobernará sin dejarse ver, desde el rincón, moviendo con toda modestia los hilos de la autoridad. La Cabra somete su afán de sobresalir para conseguir lo que su afán de sobresalir realmente desea: la posición del auténtico líder. Con cautelosa prudencia, bondadosa pero tenaz, resguarda el pasado del descuido y protege de la confusión el presente, para que tú puedas construir sin riesgos el mañana.

No necesita ir al frente del desfile, con bombos y platillos; es el quien, entre bambalinas, autoriza el desfile y determina su recorrido. Todos los temerarios que se pasean por la cuerda floja necesitan de la red firme y segura de Capricornio cuando un error de cálculo les precipita al vacío.

La disciplina y formalidad del negro azabache y el azul marino, la práctica solidez del marrón, los sueños –honestos y profundos– del verde oscuro: he aquí los serenos colores de su perdurable arco iris. Camina lentamente a través de su selva silenciosa, alfombrada de suave musgo y decorada de hiedras, y busca los ocho tesoros escondidos de Saturno.

Bajo el sauce llorón de Capricornio hay enterrados rojos y suntuosos rubíes. Quédate… para conocer la eterna belleza del ónice, pura y tersa. El plomo de Capricornio es sólido, y con su carbón se encienden fuegos perdurables.

Capricornio