El caracol marino es una piedra pequeña y opaca de color marroncito o pardo que tiene una forma redondeada que parece un oreja pequeñita. Esta piedra es muy conocida y apreciada en toda la cuenca del Mediterráneo y hasta hace poco tiempo era fácil encontrarla en los establecimientos de joyeros artesanos. Con estas piedras confeccionaban pendientes y colgantes y las consideraban como un calmante de los dolores de cabeza. Todavía se pueden encontrar en establecimientos con solera donde continúen con el trabajo artesano y tradicional, sobre todo en las ciudades costeras.
En el lapidario alfonsino viene citado en el grado 25 de Acuario: Es la piedra que se hace en el espinazo del caracol de la mar; es contada entre las de los animales.
La consideraban como una piedra medicinal, la molían y la transformaban en polvos para diversos usos medicinales. Está relacionada con la estrella delantera de las dos que están juntas en los pechos del Caballo Mayor, la Zeta de Pegaso, Homan, sobre el grado 16 de Piscis.
Propiedades astrológicas del caracol marino
Esta piedra actúa como un calmante del sistema nervioso, es muy útil para tratar los dolores de cabeza de origen nervioso. A nivel astrológico se comporta como una conjunción armónica de Marte y Mercurio. Esta afortunada combinación ayuda a eliminar los problemas en el habla como la tartamudez o las dificultades para expresarse. El uso continuado puede provocar un hablar enérgico con tendencia a imponer las ideas. Muy útil pues para aquellas personas que les falte la energía expresiva. Es una piedra para estudiantes, vendedores, profesores y oradores.
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