Hijo Géminis, padre Capricornio

Papá Capricornio, con su mentalidad de negocios, espera que su hijo sea astilla de tal palo: serio, trabajador, triunfador y rico.

Géminis podría hacerlo muy bien, pues es un comunicador nato, un verdadero hechicero con las palabras, pero no es un ambicioso diligente como su padre. La principal ambición de Géminis en la vida es divertirse, cuanto más, mejor.

Papá tendrá que aceptar que Géminis ve las cosas de otra manera, o habrá grandes choques entre ellos. A este niño le gusta pasar de un pasatiempo a otro, dejar proyectos inconclusos, y siempre está buscando algo nuevo.

Capricornio cree que hay que seguir las cosas hasta el fin, y no tiene demasiado interés en las últimas tendencias.

Capricornio ama el hogar y lo defenderá hasta las últimas consecuencias, aunque muchas veces parezca un poco frío y desinteresado con respecto a la familia. A Géminis le encanta salir, conocer gente, disfrutar de una activa vida social y del calor de las conversaciones vitales.

Para Capricornio, la vida social es simplemente una manera de aumentar su reputación. Le agradan particularmente las ocupaciones cívicas o en grandes compañías donde pueda trepar peldaño a peldaño por la escala social.

Ninguno de los dos es muy emotivo, así que se sienten muy bien sin tener que hacer grandes demostraciones de afecto o escenas sentimentales. A Géminis le gusta fingir que es más frío de lo que es y que carece de sentimientos; pero sí los tiene.

Géminis necesita ser reconocido por su maravillosa imaginación, las historias inventivas que fabrica, su sagacidad y su peculiar estilo con las palabras y su sentido de la aventura. Si papá le permite ser él mismo, la vida será dichosa para ambos.

Signo Géminis